El sabor de Air Tahiti Nui
23 Agosto 2022
El pasado mes de diciembre, con motivo de las fiestas de fin de año, Air Tahiti Nui ofreció durante sus vuelos chocolates con un sutil sabor a flor de Tiaré, elaborados por la talentosa Morgane Richard de Tahiti Origin by M.
Dado el éxito que tuvo esta golosina especial entre nuestros clientes, Air Tahiti Nui decidió ponerla a disposición todo el año en el menú de su café gourmet en la clase Poerava Business, en el trayecto París - Los Ángeles. Gracias a los nuevos moldes especiales creados con la efigie de la empresa, ahora son chocolates con la forma del Tiaré Tahiti los que se ofrecen a los pasajeros. ¿Es la primera empresa del mundo en tener gusto? En cualquier caso, tiene un logotipo para comérselo.
Air Tahiti Nui y el viaje de los cinco sentidos
Un viaje a la Polinesia... con Air Tahiti Nui, significa un estímulo para sus cinco sentidos, mucho antes de pisar la cálida tierra de Tahití, la gran isla de acogida que se abre hacia los 5 archipiélagos polinesios.
Mirada
Todo comienza al observar elementos impactantes:
- los signos distintivos azul y verde del avión que le llevará hasta lo más alto del cielo, hacia las entrañables latitudes de la Polinesia
- el blanco del logotipo de la empresa, que se compone de una flor de tiaré de Tahití, cuyo corazón es el delicado perfil de una tahitiana.
Caricia
Esta iniciación al viaje polinesio continúa con el tacto: el primer contacto con la compañía Air Tahiti Nui fue el regalo que le hicieron al entrar en la cabina: una flor tiaré de Tahití, el emblema de las islas de la Polinesia.
Música
A continuación, viene el oído. Esta sensación comienza con un sonido cristalino, más bien una nota, clara, viva, alegre, vaporosa: la de un ukelele, una guitarra pequeña que acompaña las canciones de los polinesios y que da ritmo a su instalación en el avión.
Con Air Tahiti Nui, este tercer sentido también es el del silencio de la cabina de vuelo: en la tranquilidad de la noche, cuando nos acurrucamos en los cómodos asientos para ver nuestro programa favorito, en ese momento, incluso podríamos escuchar la caída de un pétalo.
Perfume
La flor de tiaré de Tahití aviva el deseo del olfato. Esto es un momento esencial de este paseo por el país de los sentidos. La fragancia es sutil, como una dulce calidez, reforzada por cítricos sensibles y aterciopelados, un frescor suave y vaporoso. Este perfume nos transporta a las islas del Mar del Sur
Queda el sabor...¿Y si nuestro logotipo tuviera un sabor?
Degustación
Mirada, contacto, música, perfume... su viaje con nuestra compañía ha ido adquiriendo forma. Lo único que falta en este festival de los sentidos de Air Tahiti Nui es el sabor, expresión final de su viaje a la Polinesia. Pero, ¿qué sabor puede tener la compañía de la tiaré? Morgane Richard, creadora de Tahiti Origin by M, ha querido asumir este reto de dar un sabor a Air Tahiti Nui.
El despertar de las papilas gustativas
Morgane Richard no sólo produce chocolate. Con su empresa Tahiti Origin by M, elabora chocolates únicos a partir de las vainas de cacao de la Polinesia y del cacao del Pacífico Sur en general, que reflejan la tierra donde crecen estos gigantescos árboles, los cacaos.
Los de la Polinesia ofrecen una fruta con exquisitos sabores a pan tostado y frutos secos torrefactos. Comer su chocolate o degustar una de sus creaciones es una experiencia gourmet, un viaje gustativo. Cómo poder imaginarnosla como cómplice en un viaje aéreo, puesto que Morgane sólo propuso a Air Tahiti Nui un despegue.
A Morgane siempre le ha gustado descubrir nuevos sabores y combinarlos con el chocolate. Recuerda que: "Ya había trabajado con flores, como el hibisco o el jazmín en Vietnam". No obstante, estas asociaciones no siempre son fáciles. La Taina, por ejemplo, sería probablemente demasiado fuerte. "Siempre hay que encontrar la cantidad adecuada." Un equilibrio que Morgane buscó con la tiaré de Tahití.
La flor emblemática de Air Tahiti Nui
"Me encanta esta flor, es un perfume embrujador que me recuerda a mi infancia". La idea se me ocurrió una mañana, sin más: crear un chocolate a la flor de tiaré. De una idea a otra, se imagina proponiéndola a Air Tahiti Nui. La tiaré de Tahití es el símbolo de la empresa. "Quería dar las gracias a Air Tahiti Nui por apoyarme desde mi lanzamiento." Quería ofrecerles algo único.
"Una asociación sencilla, única y tan deliciosa"
Morgane conoce desde hace tiempo una serie de productos elaborados con flores de Tiaré, especialmente las mermeladas. Pero no encuentra en ellos la delicadeza, la verdadera identidad de esa emblemática flor. Entonces, compró flores frescas en el mercado de Papeete. De vuelta a su laboratorio, dejó en infusión las flores con su crema para hacer una ganache. El segundo intento fue el correcto. Sólo tardó una semana Morgane para encontrar el justo equilibrio de sabor, respetando la identidad de la flor y la identidad del chocolate.
Una materia prima local para un chocolate siempre 100% local
Morgane elige sus flores entre las más puras de todas: vienen directamente de Maiao, una isla salvaje al sur de Moorea. "Son unas flores muy bonitas con una agradable fragancia, llegan muy frescas". Por supuesto, esto hace que el proceso sea complicado, pero es esencial, ya que la flor seca revela una fragancia diferente. Para resaltar la sutil fragancia de la flor, garantizar la conservación del chocolate y preservar toda la delicadeza de esta original alianza, Morgane optó por hacer una ganache.
Cuando ofreció al equipo de Air Tahiti Nui su chocolate tiare, fue toda una revelación. Su creación evoca un sabor floral, parecido al del té, al tiempo que recupera la intensidad del cacao polinesio y la identidad única de la flor de tiaré
Una flor divina para un fruto sagrado
Para los indios del Caribe, como los aztecas y los mayas de América Central, el árbol del cacao y su fruto eran sagrados y su uso estaba codificado. Por eso los españoles lo bautizaron en 1495 como Theobroma cacao: en griego, el alimento de los dioses.
Sin embargo, entre los polinesios, antes del encuentro con los europeos, la tiaré tahitiana también era una flor sagrada. Su uso estaba reservado a los ari'i (los jefes y sus familias). Cuando se celebraban las bodas principescas, los fares (casas) y los lechos se forraban con miles de flores de tiaré que traían la bendición de los dioses.
El cacao y la tiare Tahiti juntos en un chocolate exclusivo: esto es sin duda una alianza sagrada.
